Autor: José Carlos Contreras Farías
E-mail: a20039001@pucp.edu.pe
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El Paisaje del Desierto de la Costa Peruana ha sido depositario de distintas significaciones por parte de las culturas o grupos humanos que en un origen lo habitaron. Finis Terrae, o tierra donde termina el mundo; proyección empática del sentimiento primitivo de terror y angustia; aquí nos sumamos a una hipótesis harto desvalorada: El paisaje es metáfora.
Teniendo como base esta premisa nos rehusamos a aceptar, en un primer término, la Tierra (Patria = Heimat heideggeriano) como objeto en su dimensión puramente material y rechazamos así mismo los vicios que a su vez trae consigo esta representación: El paisaje como objeto de especulación puramente utilitario.
La presente investigación pretende hacer patentes los vínculos tejidos entorno a la tríada desierto-arte-arquitectura, con la intención de reencontrar la dimensión significativa, el sentido mismo del paisaje del desierto costero. ¿Qué relaciones se tejen entre la noción de escritura, en la obra plástica de Jorge Eduardo Eielson, y aquellos otros escritos monumentales, los enigmáticos geoglifos de la pampa de Nazca?¿Qué relación existe entre el pensamiento mítico precolombino, y la valoración sacralizada de la piedra en la obra de Lika Mutal o Emilio Rodríguez Larraín?¿Qué nuevas formas de representación está produciendo el arte contemporáneo en relación a la temática misma del paisaje costero? ¿Y finalmente cómo puede nutrirse la arquitectura y el urbanismo, responsables principales de la transformación física del paisaje a través del proyecto (proyecto como instrumento, como síntesis transformativa), del cúmulo de representaciones hasta ahora producidas?. Estas son tan solo algunas interrogantes abiertas por la investigación en proceso.
Teniendo como base esta premisa nos rehusamos a aceptar, en un primer término, la Tierra (Patria = Heimat heideggeriano) como objeto en su dimensión puramente material y rechazamos así mismo los vicios que a su vez trae consigo esta representación: El paisaje como objeto de especulación puramente utilitario.
La presente investigación pretende hacer patentes los vínculos tejidos entorno a la tríada desierto-arte-arquitectura, con la intención de reencontrar la dimensión significativa, el sentido mismo del paisaje del desierto costero. ¿Qué relaciones se tejen entre la noción de escritura, en la obra plástica de Jorge Eduardo Eielson, y aquellos otros escritos monumentales, los enigmáticos geoglifos de la pampa de Nazca?¿Qué relación existe entre el pensamiento mítico precolombino, y la valoración sacralizada de la piedra en la obra de Lika Mutal o Emilio Rodríguez Larraín?¿Qué nuevas formas de representación está produciendo el arte contemporáneo en relación a la temática misma del paisaje costero? ¿Y finalmente cómo puede nutrirse la arquitectura y el urbanismo, responsables principales de la transformación física del paisaje a través del proyecto (proyecto como instrumento, como síntesis transformativa), del cúmulo de representaciones hasta ahora producidas?. Estas son tan solo algunas interrogantes abiertas por la investigación en proceso.
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