Autora:Ángela Milagro Yangali Pareja
Ciclo 2019-2
Sumilla.
La relación entre el cine y la
ciudad es más estrecha de lo que creemos, desde la invención de los
kinetoscopios, los inventores estaban fascinados por capturar el movimiento de
la muchedumbre urbana. Las imágenes de ciudades se comenzaron a exportar y
representaron una oportunidad de conocer las ciudades del mundo sin tener que
viajar. Cuando el cine llegó al Peru en
1896, significo un enlace directo con la modernidad que incluso el Presidente
Leguía uso a su favor en su campaña política. La primera película que ecpone
una representación de la ciudad Mientras Lima duerme expuso una Lima bohemia
que iba en contra de los preceptos morales de la época. Más tarde cuando el
aspecto de la ciudad comenzó a cambiar por las obras de Leguía, la película
Palomillas del Rímac expresó un tono nostálgico por el criollismo de los
callejones gregarios. Desde la llegada
del migrante, el principal actor urbano que cambia la ciudad que el Grupo
Chaski comienza su extensa filmografía. Ahora que Lima ha cambiado radicalmente debido al retorno
neoliberal que ha desatado el dominio de los centros comerciales en desdén de
la cultura, el cine la ha retratado como una ciudad de las derivas, desigual y
maquillada.
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